Tiempo total: 40 minutos.
Rinde: 2 porciones.
Cocción: fuego directo (frito).
Calorías por porción: 330.
Calorías totales: 660.
Ingredientes:
- 350 gramos de calamar cortado en aros
- 2 huevos
- 1/2 taza de agua tibia
- 1 cucharada colmada de bicarbonato de sodio
- 1/2 litro de aceite de girasol (no probé qué sabor le queda con aceite de oliva
- 1/2 taza (o cantidad necesaria) de cualquier tipo de harina
- Un chorrito de leche (puede ser leche de soja)
- Pimienta
- Sal
- Jugo de limón
Elementos:
- Sartén profunda u olla pequeña, de un diámetro no muy grande.
- Espumadera
- 2 bowls
- Cuchara
- Cocina/Hornalla
- Bandeja o plato
- Papel de cocina
Preparación:
1. No es necesario descongelar el calamar antes de empezar la preparación. Pero sí será necesario sacarle el hielo y subirle un poco la temperatura, así que es recomendable ponerlo bajo la canilla de agua fría un ratito.
Yo usé una bandejita de estas:
2. Poner en un bowl el agua tibia junto con el bicarbonato de sodio y revolver bien para integrar. Agregar los aros de calamar (si están muy fríos, enfriarán el agua) y dejar reposar 10 o 15 minutos para que la carne se tiernice.
3. En otro bowl, cascar 2 huevos y batirlos un poco hasta que se liguen (que queden integradas yemas y claras). Agregar un chorrito de leche y harina, y remover hasta que se haga una crema espesa.
4. Mientras se espera que terminen de reposar los aritos de calamar, se puede encender el fuego y poner la sartén con el aceite para que empiece a calentarse.
5. Escurrir y secar los aros de calamar (puede ser envolviéndolos con un trapo de cocina o poniéndolos sobre papel absorbente). Colocarlos dentro de la crema hecha en el paso 3 y agregar un poco de pimienta. IMPORTANTE: no agregar sal, ya que eso haría que se endurezcan. Se sazonan al servir.
6. Cuando el aceite esté muy caliente, empezar a colocar las rabas dentro, en tandas de 4 o 5 unidades, con cuidado ya que el aceite puede empezar a saltar.
7. Apenas tomen un color levemente dorado, retirarlas con la espumadera y ponerlas en una bandeja cubierta con papel de cocina u otro papel absorbente. La idea es que permanezcan en el aceite el menor tiempo posible, por eso la necesidad de que esté muy caliente (para que se cocinen rápido y no empiecen a absorber aceite extra).
Lo ideal es prepararlas con freidora, que hará que queden mucho más secas y crocantes.
Al momento de comerlas, agregarles sal y jugo de limón.
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